Angara dijo:
“Si vamos a buscar a Sita en Lanka, como Sampati nos ha dicho, alguien tiene que saltar a través del océano”
Aun muchos de los monos intentaron saltar, sólo Hanuman tuvo éxito cruzando el océano. En un salto él llego a las altitudes de Mahendra Giri desde donde dio otro salto hacia adelante. Sin embargo en el medio de las dos orillas, Surasa, la madre de los magos, se tragó a Hanuman, pero Hanuman salió por sus orejas y continúo su viaje hacia Lanka.
Cuando Hanuman había avanzado gran distancia, un espíritu malo llamado Chaya Grahini obstruyó su sendero y le dio un ataque misterioso sobre su sombra. Hanuman pudo comprender rápidamente lo que había pasado y mató al espíritu malo con una patada de su pie izquierdo. Así continuó su viaje pero pronto se volvió débil y exhausto. Entonces la montaña Vainaka emergió del océano y alimentó a Hanuman con frutas y raíces. Siguiendo su viaje Hanuman llego a Lanka en el atardecer.
Hanuman venció a Lanka Laksmi quien trato de prevenir su entrada a la ciudad. Realmente Lanka Laksmi era Vijaya Laksmi, quien había sido maldecida por el señor Brahma. Después de derrotarla, Hanuman vio a Sita sentada bajo el árbol Asoka. Sin que nadie se percatara, Hanuman saltó y se sentó sobre la rama del árbol.
Esa noche Ravana vestido en todo su esplendor, visitó a Sita y trató de seducirle con palabras suaves y glorificaciones sutiles, pero todo fue en vano. Entonces Ravana la amenazó con castigos, los cuales no produjeron ningún efecto en ella. Finalmente Ravana instruyó a las mujeres raksasas diciéndoles que Sita debía estar lista para estar con él dentro de un mes.
Las raksasis rodearon a Sita y comenzaron a cantar y describir las grandezas y meritos de Ravana. Pero Sita continuaba llorando desconsoladamente. Poco después enviaron a las hijas de Vibhisana el gran devoto de Vishnu, Trijata y Sarama para consolar a Sita. Trijata tenía devoción sin límites hacia Rama y gran amor por Sita. Cuando se encontraban solas, Sita le contó varias cosas acerca de su pasado. Ella le habló de su infancia, su juventud, matrimonio, su permanencia en Ayodhya, la vida en el bosque y la vida en Pancha-bati. Mientras relataba su historia Sita comenzó a lamentarse pensando cuando seria su regreso.
Hanuman quien escuchó la conversación de Sita, completó la historia relatando la muerte de Jatayu, la salvación de Kavanda y Sabari, la alianza entre Rama y Sugriva, los monos en la búsqueda de Sita, el encuentro con Sampati, su experiencia mientras cruzaba el océano y su encuentro con Sita.