El reino de Ramacandra se volvió aún más próspero. Fue durante este período que Ramacandra, mató a Labanasura, el hijo de Madhu en la gran ciudad llamada Durga, en el centro del bosque Madhu, como había sido deseado por los munis en las orillas del Jamuna. Después de la muerte de Labana un séquito de Gandarvas, llamados Sailusas, quienes vivían en las orillas del mar del Oeste, se declararon enemigos de Ayodhya. Pero Ramacandra pronto los aniquiló.